Y ACONTECIÓ que morando David en su casa, dijo David al profeta Nathán: He aquí yo habito en casa de cedro, y el arca del pacto de JEHOVÁ debajo de cortinas.
Porque no he habitado en casa alguna desde el día que saqué á los hijos de Israel hasta hoy; antes estuve de tienda en tienda, y de tabernáculo en tabernáculo.
En todo cuanto anduve con todo Israel ¿hablé una palabra á alguno de los jueces de Israel, á los cuales mandé que apacentasen mi pueblo, para decirles: Por qué no me edificáis una casa de cedro?
Por tanto, ahora dirás á mi siervo David: Así dijo JEHOVÁ de los ejércitos: Yo te tomé de la majada, de detrás del ganado, para que fueses príncipe sobre mi pueblo Israel;
Y he sido contigo en todo cuanto has andado, y he talado á todos tus enemigos de delante de ti, y hete hecho grande nombre, como el nombre de los grandes que son en la tierra.
Asimismo he dispuesto lugar á mi pueblo Israel, y lo he plantado para que habite por sí, y que no sea más conmovido: ni los hijos de iniquidad lo consumirán más, como antes,
Y desde el tiempo que puse los jueces sobre mi pueblo Israel; mas humillaré á todos tus enemigos. Hágote además saber que JEHOVÁ te ha de edificar casa.
Y será que, cuando tus días fueren cumplidos para irte con tus padres, levantaré tu simiente después de ti, la cual será de tus hijos, y afirmaré su reino.
Y aun esto, oh Dios, te ha parecido poco, pues que has hablado de la casa de tu siervo para más lejos, y me has mirado como á un hombre excelente, oh JEHOVÁ Dios.
¿Y qué gente hay en la tierra como tu pueblo Israel, cuyo Dios fuese y se redimiera un pueblo, para hacerte nombre con grandezas y maravillas, echando las gentes de delante de tu pueblo, que tú rescataste de Egipto?
Permanezca pues, y sea engrandecido tu nombre para siempre, á fin de que se diga: JEHOVÁ de los ejércitos, Dios de Israel, es Dios para Israel. Y sea la casa de tu siervo David firme delante de ti.
Y ahora has querido bendecir la casa de tu siervo, para que permanezca perpetuamente delante de ti: porque tú, JEHOVÁ, la has bendecido, y será bendita para siempre.