Y El ángel de JEHOVÁ subió de Gilgal á Bochîm, y dijo: Yo os saqué de Egipto, y os introduje en la tierra de la cual había jurado á vuestros padres; y dije: No invalidaré jamás mi pacto con vosotros;
Con tal que vosotros no hagáis alianza con los moradores de aquesta tierra, cuyos altares habéis de derribar: mas vosotros no habéis atendido á mi voz: ¿por qué habéis hecho esto?
Y el pueblo había servido á JEHOVÁ todo el tiempo de Josué, y todo el tiempo de los ancianos que vivieron largos días después de Josué, los cuales habían visto todas las grandes obras de JEHOVÁ, que el había hecho por Israel.
Y toda aquella generación fué también recogida con sus padres. Y levantóse después de ellos otra generación, que no conocían á JEHOVÁ, ni la obra que él había hecho por Israel.
Y dejaron á JEHOVÁ el Dios de sus padres, que los había sacado de la tierra de Egipto, y fuéronse tras otros dioses, los dioses de los pueblos que estaban en sus alrededores, á los cuales adoraron; y provocaron á ira á JEHOVÁ.
Y el furor de JEHOVÁ se encendió contra Israel, el cual los entregó en manos de robadores que los despojaron, y los vendió en manos de sus enemigos de alrededor: y no pudieron parar más delante de sus enemigos.
Por donde quiera que salían, la mano de JEHOVÁ era contra ellos para mal, como JEHOVÁ había dicho, y como JEHOVÁ se lo había jurado; así los afligió en gran manera.
Y tampoco oyeron á sus jueces, sino que fornicaron tras dioses ajenos, á los cuales adoraron: apartáronse bien presto del camino en que anduvieron sus padres obedeciendo á los mandamientos de JEHOVÁ; mas ellos no hicieron así.
Y cuando JEHOVÁ les suscitaba jueces, JEHOVÁ era con el juez, y librábalos de mano de los enemigos todo el tiempo de aquel juez: porque JEHOVÁ se arrepentía por sus gemidos á causa de los que los oprimían y afligían.
Mas en muriendo el juez, ellos se tornaban, y se corrompían más que sus padres, siguiendo dioses ajenos para servirles, é inclinándose delante de ellos; y nada disminuían de sus obras, ni de su duro camino.