Isus se okrenu prema njima pa im reče: "Kćeri Jeruzalemske, ne plačite nada mnom, nego plačite nad sobom i nad djecom svojom.
Mas Jesús, vuelto á ellas, les dice: Hijas de Jerusalem, no me lloréis á mí, mas llorad por vosotras mismas, y por vuestros hijos.